Luz azul

Es probable que hayas oído el término "luz azul" antes y hayas escuchado todo tipo de comentarios malos al respecto; dolores de cabeza, irritación de los ojos hasta insomnio. Pero... ¿qué es exactamente la luz azul y cómo está conectado con nuestros dispositivos digitales? No digas más, tenemos las respuestas.

Para entender la luz azul y sus varios efectos necesitamos analizar el famoso "espectro electromagnético". Cuando estás afuera y la luz del sol está iluminando todo el espacio que te rodea, estás realmente percibiendo una multitud de partículas electromagnéticas que viajan en ondas por toda la galaxia. Algunas de estas partículas son visibles para el ojo humano, otras —como los rayos UV que queman nuestra piel— no lo son. Estas ondas varían en términos de longitud y fuerza, así como en la energía que emiten, siendo las ondas más pequeñas las que emiten más energía. El espectro electromagéntico está formado por luz roja, naranja, amarilla, verde y azul, siendo la azul la más visible para el ojo humano y, también, la que emite la mayor cantidad de energía. Es por eso que es conocida como luz HEV (por sus siglas en inglés: high-energy visible).

¿Ahí sigues? Un poco más de información científica: las ondas se miden en nanómetros (nm), es decir, una milmillonésima parte de un metro. La luz azul está en un rango de entre 380 y 500 nm, comparado con la luz roja que es de 700 nm aproximadamente. Para simplificar toda esta información... ¡la luz azul es una de las ondas más cortas y con más alta energía en el espectro y corresponde a un tercio de toda la luz visible. ¡Y con mucha razón! Tiene grandes beneficios.

El sol es el productor más grande de luz azul que hay. Durante el día, las ondas de luz azul nos ayudan a incrementar nuestros niveles de atención, haciéndonos más alertas y productivos. También, nos ayuda con nuestro humor... ¿alguna vez has escuchado del trastorno afectivo estacional? Es un trastorno común en países nórdicos causado por la falta de luz del sol en otoño e invierno y que, en situaciones extremas, ocasiona depresiones. De hecho, existen lámparas que se usan para tratar el trastorno que emiten grandes cantidades de luz azul, tratando de imitar el efecto que genera el sol. La exposición a la luz del sol también regula nuestro ritmo circardiano (el ciclo natural de 24 horas al que todos estamos acostumbrados), para que nuestros cuerpos sepan que apenas salga el primer rayo del sol despertemos y cuando descansar e ir a dormir apenas inicie la noche. ¡Así que no! No todo es malo con la luz azul. Sin embargo...

Los potenciales efectos negativos de la luz azul han resaltado en los últimos años porque cualquier pantalla digital como computadoras, tabletas y celulares también la emiten. Debido a que muchos de nosotros pasamos al menos ocho horas al día enfrente de una pantalla trabajando, viendo lo que publican nuestros amigos en redes sociales o simplemente mandándonos mensajes con nuestros seres queridos, nos exponemos demasiado a luz azul artificial. Y aunque nuestros ojos fueron diseñados para soportar una gran cantidad de luz, nuestra retina se debilita con el tiempo deteriorando nuestra resistencia natural y generando todo tipo de efectos negativos que a largo plazo pueden ser irreversibles.

Y no queremos preocuparte de más, pero sí resaltarte que estudios han demostrado que una exposición prolongada y repetida a la luz azul puede tener fuerte consecuencias en la salud de las personas. En el corto plazo: comezón, irritación y dolores generalizados en los ojos. En el largo plazo: existe la posibilidad que se acelere la degeneración macular y se dañen las células en la retina. La luz azul que emiten las pantallas afecta el sueño también; reduce la producción de melatonina, la hormona responsable de ponernos a dormir. ¿Te habías preguntado antes por qué te cuesta más trabajo irte a dormir si te quedas hasta tarde viendo la computadora o televisión? Ahora lo sabes.

Pero, ¡no te preocupes! Para eso estamos nosotros. Escoge tu favorito de nuestra colección de lentes para pantallas y siéntete tranquilo protegiendo tus ojos de la luz azul.